Anoche soñé contigo. Y no estaba durmiendo, todo lo contrario, estaba bien despierto. Soñé que no hacía falta hacer ningún esfuerzo, para que te entregaras, en ti yo estaba inmerso... Qué lindo que es soñar. Soñar no cuesta nada, soñar y nada más, con los ojos abiertos, y no cuesta nada más que tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario